Viajamos a Cuba a finales de abril. La plaza de la Revolución de La Habana nos recibió engalanada con motivo del 1 de Mayo. La toma de contacto ya nos sirvió para sumergirnos en el ambiente festivo de la isla. En Cuba, allá donde mires hay músicos tocando. El viaje lo diseñamos con Barceló tomando La Habana como base y desde allí organizamos una agenda repleta de planes a Pinar del Río -la playa más cercana a la capital cubana-, Varadero y los Cayos.

Entiendo que Cuba ofrece la posibilidad de estar tumbado en la playa todo el día, pero lo de visitar lugares sin parar se corresponde más con nuestro concepto de viaje.

A 150 kilómetros a la redonda de La Habana tienes multitud de sitios que visitar y no debes preocuparte por el transporte. Autobuses públicos, touroperadores, taxis, coches privados, alquilados... todo está a tu disposición para moverte por la isla caribeña.

Cuba y su gente

Destinos hay muchos pero lo que hace a Cuba un viaje único es el carácter de sus gentes. Aún recuerdo una excursión a las Playas del Este donde los cubanos suelen ir a pasar el día. Lo que iba a ser una jornada tranquila de playa y chiringuito se convirtió en un trajín de experiencias y conversaciones con varias familias. Incluso se ofrecieron a compartir su comida y bebida y nos invitaron a sus casas. ¡Menuda experiencia! Nos animaron a hacer una excursión en un barco a Regla, en la provincia de Ciudad de La Habana. Ojo porque solo se puede comprar el billete con moneda local.

Tengo que confesar algo, ya que nunca he creído en estas cosas. Sin embargo, y lo digo sin exagerar, todavía me tiemblan las piernas al recordar una premonición que nos reveló una santera duarante nuestra estancia en Cuba y que se hizo realidad a los cuatro meses.... Menos mal que era positivo. Es fácil de imaginar, ¿verdad? Hasta en eso salió bien el viaje.

De viajero a viajero... Que no falte el chubasquero. Aunque viajes en mayo o en pleno agosto, tu maleta debe estar bien provista de camisetas de algodón, pantalones cortos, calzado deportivo, crema protectora y gafas de sol.

Tampoco está de más un repelente para insectos. Eso sí, no olvides meter un chubasquero porque, aunque solo lo uses cinco minutos, te puede salvar de un buen chaparrón.

La carta de bebidas nos dejó maravillados: zumos, guarapas, piñas coladas, mojitos, cervezas... Todas riquísimas y de una variedad mareante, como las que degustamos en La Floridita junto al busto de Hemingway.

Consejo Barceló
Cómo y cuándo viajar. Uno de los lugares más bellos de Cuba es Cayo Santa María. Allí te esperan algunas de las más increíbles playas del mundo y, también, el espectacular Barceló Cayo Santa María Beach Colonial Resort. Visita www.barceloviajes.com y encuentra el mejor precio para disfrutar en el Resort de una experiencia viajera inolvidable.